Wei WuXian decidió solicitar permiso para entrar en la biblioteca
privada.
No estaba seguro de cual opción era más accesible o tendría más
éxito; el líder de secta, hermano de Lan WangJi, la persona en quien su pareja
más confiaba y viceversa, o alguno de los ancianos que tanto lo odiaban. Con
ninguna de las opciones podía confiar en que su misión se mantuviera secreta.
Tenía una idea, buscar algún método para lograr y manipular la desdoblación de
manera que su alma pudiera salir ilesa de los peligros en las pesadillas de Lan
WangJi, o tal vez el mismo estudio podría abrir más caminos a técnicas
extracorporales que no involucraran un peligro mortal.
Antes de acudir a Lan XiChen se encontró con alguien más, y un
pequeño impulso lo hizo acudir de manera desesperada con esta persona, quien
podría asegurar le gritaría una negación antes de si quiera escuchar su
petición: Lan Qiren. Para su sorpresa el maestro Qiren escuchó a regañadientes
su solicitud, lo miró con sospecha medio minuto y suspiró, como si supiera que
el negarse solo traería más dificultades o como si él también quisiera ayudar
pero no tuviera una mejor idea.
Sin decir una palabra, le hizo un gesto a Wei WuXian para que lo
siguiera y lo dirigió hasta la biblioteca, hasta la habitación de los libros
prohibidos. Allí Lan Qiren se movió con libertad, como quien supiera
exactamente el lugar en que estaba cada libro, que probablemente fuera el caso,
se agachó y movió una pila completa de cuadernos para tomar un libro escondido
detrás de los demás. Ni siquiera revisó si había tomado el libro correcto a
pesar de que a simple vista todos parecían iguales, del mismo grosor y con la
cubierta color gris sin ninguna palabra en la portada ni en la primera hoja.
Lo dejó en sus manos y solo le dijo.
- Espero no arrepentirme.
El libro no trataba sobre cómo desdoblarse, tampoco contenía
sugerencias para una mejor manipulación de la técnica empatía, era algo veinte
veces mejor... ¡Era el manual para utilizar el incienso! Contenía un listado de
objetivos para el que fue creado y las formas en que se podía configurar con
solo manipular sus piezas, depositando energía espiritual en solo algunas
partes del incienso. Además agregaba una bitácora con las experiencias de su
creador. Wei WuXian se arrepintió de no haberle pedido ayuda antes a Lan Qiren,
si había alguien que manejaba todos los secretos de la secta, probablemente
fuera él.
Por la noche Wei WuXian tenía todo preparado desde antes que Lan
WangJi se arrastrara con sus pesadas ojeras a la cama. Desde hace una semana
atrás que la promesa de "todos los días" había quedado congelada
debido al cansancio del mayor, pero ninguno de los dos parecía tener ganas de
cobrar las deudas, emocionalmente estaban exhaustos, uno más que el otro, pero
ambos al fin y al cabo.
Una vez que el más alto se acomodó abrazando el cuerpo más pequeño,
no notó que el incienso estaba encendido, por lo que solo fue cosa de minutos
para que cayera dormido. Por su parte Wei WuXian se quedó unos minutos más
despierto pensando en que según las modificaciones que le había hecho a las
piezas del incienso, él podría ocupar su propio cuerpo si era parte del sueño
de Lan WangJi y también controlar parte de sus sensaciones corporales, aunque
no había llegado a leer si podía controlar el entorno. Ya lo averiguaría al día
siguiente, mientras tanto deseó con fuerza que su esfuerzo valiera la pena.
En un suspiro se durmió, y una hora y media después su conciencia
fue arrastrada hasta otro lugar.
.
.
.
- Oh, entonces comió demasiado - se escuchó decir en su propia voz.
En cuanto su alma cayó en el cuerpo del sueño se sintió como una
sacudida en su interior, inmediatamente el dolor punzante en su pecho lo
enmudeció, se quedó congelado mientras observaba a su alrededor.
Olor a humedad, sangre y sándalo. Sobre su cabeza solo había una
pared de rocas, el fuego de una fogata chispeaba en frente de sí abrigándole un
poco el cuerpo. Sentía los músculos cansados dentro de esa enorme cueva.
"La
técnica para utilizar mi propio cuerpo en el sueño funcionó... ¡Pero por qué
justo tenía que ser en este momento! ¡Maldita sea que tengo mala suerte... y
hambre!"
No sabía si reír por su éxito o llorar por el momento elegido. Miró
a su lado y se encontró con el rostro joven de Lan WangJi que estaba girado en
la dirección opuesta, ignorándolo con obviedad. Su pierna herida estaba
expuesta y descubierta, tenía pequeñas hojas insertadas dentro de tres agujeros
que profundamente habían desgarrado la carne hasta llegar al hueso. Era
doloroso de ver, aunque por el inexpresivo rostro del segundo maestro Lan
cualquiera podría decir que nada le ocurría.
"Incluso
en esta situación LanZhan se ve tan... Debo contenerme si quiero evitar que me
descubra cuando despierte. ¿Qué más había dicho en aquella vez? Debo reaccionar
rápido y seguir la corriente... ¡Ah, cierto!"
- ¿Has practicando inedia? Creo que nosotros podremos resistir un
par de días, pero si pasa demasiado tiempo perderemos fuerza y poder espiritual
- se sintió complacido al notar que lo recordaba. Sin pensar demasiado siguió
el hilo de sus memorias, dibujando un mapa con una rama en el suelo comenzó a
hablar concentrado en citar las palabras correctas - La distancia desde esta
montaña a Gusu es más corta que desde la Montaña a Yunmeng. Probablemente la
gente de tu secta llegue primero. Seamos pacientes. Incluso si no vienen, solo
tendríamos que esperar a que Jiang Cheng llegue al embarcadero del Loto. Él es
astuto, la secta Wen no lo detendrá. No hay de qué preocuparse - sonrió
satisfecho y suspiró. Notó que no podía cambiar el estado de su cuerpo o al
menos adormecer para sí parte del dolor, se preocupó del poco control que
tendría en el sueño si el subconsciente de Lan WangJi creara un terremoto en
aquel recuerdo, luego tendría que preocuparse de perfeccionar los detalles.
- No van a venir - susurró con tono exhausto. Wei WuXian se giró a
mirarlo.
- ¿Hm? - al responder cayó en lo que estaba ocurriendo, había
seguido con concentración la línea de sus recuerdos, tanto que no notó lo que
se avecinaba.
- La profundidad de las nubes ya ha sido quemada - aunque para el
Wei WuXian del pasado no era fácil distinguir los matices en la voz de Lan
WangJi, para el del presente si lo era y sabía perfectamente que le estaba
costando mantener la compostura.
"Después
de todo es una pesadilla, este recuerdo debe causarle dolor quizás porque yo no
supe cómo reaccionar... ¿Debería cambiar el tema o llevar el sueño a lo que
ocurrió y luego hacerme cargo de mi error? Bah, no es cómo si pudiera realmente
hablar de otra cosa con lo que ya ha dicho."
- ¿Siguen todos ahí? ¿Tu padre, tu hermano? - su tono sonó con más
tacto del que recordaba haber usado. Recordó haber pensado que si bien la
situación era extrema, su familia debía estar bien... pero no fue así.
- A Padre le queda poco. Mi hermano está extraviado.
Suspiró y soltó la rama, no volteó a verlo de inmediato porque
recordaba haber esperado un par de minutos antes de atreverse a mirarlo luego
de sus palabras y entonces encontrar su rostro tal cual lo vería en ese
instante.
El corazón se le apretó profundamente cuando el fuego iluminó las
lágrimas que se deslizaban por su mejilla, dejando marcas en su rostro. En
todos esos años no había vuelto a ver a Lan WangJi llorar frente a él más que
en una situación de plena felicidad para ambos y la pesadilla que había presenciado
una semana atrás, pero aquellas lágrimas cargadas de dolor registradas en sus
sueños jamás se repitieron en el presente. Con el pecho apretado se giró
olvidando por completo el dolor de su quemadura. Arrodillado y sin permitirle
reaccionar, rodeó su cuello abrazándolo sin hacer demasiada presión, se quedó
quieto y fue cuidadoso recordando las heridas de Lan WangJi.
Su suave aroma le llenó los pulmones, como una fragancia que lo
envolvía inmediatamente en tranquilidad. Por unos momentos el único ruido en el
lugar era producido por las chispas del fuego en frente de ellos.
- Lan Zhan... - susurró en su oreja que yacía roja - No te tenses
tanto, lo siento si esto te molesta pero... no hay nada que pueda decir... Creí
que esto estaría bien.
"Tal vez
a Lan Zhan aún le molestaba el contacto físico... seré cuidadoso."
Lo sintió suspirar y relajar los hombros bajo su abrazo, luego de un
leve temblor casi imperceptible en sus hombros se permitió abrazarlo un poco
más fuerte por un momento. Por alguna razón también se sintió contrariado por
el flujo de emociones y sin ser consciente de su propio estado solo notó sus
lágrimas cuando se alejó de él lentamente cuando sus rodillas ya dolían. Pocas
cosas lo lastimaban tanto como ser consciente de que él era la causa del dolor
en su pareja y se había contenido durante toda la semana. Lan WangJi lo miró en
cuanto comenzó a alejarse lentamente, sus ojos estaban cristalinos pero
notoriamente sorprendidos de observar las lágrimas en Wei WuXian. Apretó los
labios.
- ¿Dolió? - preguntó en un susurró. El tono en su voz era suave, no
tanto como solía hablarle en el presente pero si muy distinto a cómo recordaba
haberlo escuchado en aquellos recuerdos.
- ¿Ah?
- La quemadura - cuando entendió a qué se refería rió un poco
mientras se limpiaba los ojos con el dorso de la mano derecha. Notó que los
puños de Lan WangJi estaban cerrados probablemente por soportar el bochorno de
un largo abrazo.
- No, estoy bien, es solo que no me gusta verte llorar - los ojos en
él parecieron aún más sorprendidos, luego frunció el ceño. Wei WuXian puso su
mano envolviendo el puño cerrado de Lan WangJi y este inmediatamente dirigió su
mirada a su movimiento - ZeWu-Jun es fuerte, estoy seguro de que estará bien,
reconstruirán la profundidad de las nubes y todo volverá a hacer como antes.
Pero... sobre tu padre... - como si no fuera capaz de mirarlo mientras
continuaba, el más alto cerró los ojos y apoyó su cabeza hacía atrás, sus facciones
parecían gentiles casi conmovido - Sé que tu padre debe estar orgulloso de ti,
probablemente no tenga arrepentimientos para con sus hijos - se limitó a decir,
tragó saliva y en un impulso por continuar sintiéndose cerca de él, apoyó su
rostro en su pecho. Nuevamente lo sintió tensarse. Su quemadura dolió por el
movimiento pero podía soportarlo- Claro que debe estar orgulloso de ti -
susurró más bajo - ¿Quién no lo estaría? Lan Zhan es honesto, valiente y tiene
un corazón cálido aunque diga pocas palabras... Sé que tu padre no suele estar
presente de manera activa en La Profundidad de las Nubes, pero de seguro sabe
lo perfecto que es su hijo.
La manzana en el cuello de Lan WangJi subió y bajo y Wei WuXian
escuchó sus latidos acelerados.
- Tu corazón late con fuerza, Lan Zhan - pegó la oreja a su pecho
para escuchar mejor. Pensó que iba a ser detenido o alejado cuando uno mano se
acercó a su rostro, sin embargo esta solo acunó el costado de su cabeza y
acarició su cabello aunque de manera dubitativa.
- Cuidado con tu herida - le recordó.
- Estoy bien... Si tú estás conmigo, todo estará bien - sus palabras
hicieron que el corazón de Lan WangJi latiera velozmente. - Hum, ahora tu
corazón parece bailar - se movió tomando la mano del más alto y con cuidado
fijó dos dedos sobre corazón, evitando rozar la quemadura- El mío también late
así de rápido.
Confianzudo le sonrió.
"Aaah,
¿cómo no me daba cuenta de las orejas de Lan Zhan? Están tan ruborizadas que
parecen un par de fresas a cada lado de su rostro."
- Wei Ying - la mirada intensa parecía tener una mezcla de
sentimientos - ¿Te estás comportando así solo porque...
- ¿Hum? ¿Solo por qué estás triste? - finalizó por él. Éste asintió.
"Mm... en
ese momento le había dicho solo unos momentos atrás que no me gustaban los
hombres. ¿Ahora qué hago?
...
Cómo no puedo
pensar en nada, ¿para qué complicarse?"
- Me estoy comportando así porque me gustas y no quiero que estés
triste, no quiero verte llorar, no quiero que llores nunca más, no quiero que
existan razones para que te sientas así... Me estoy comportando de esta forma
porque es insoportable para mí saber que eres infeliz - las palabras brotaron
desde el fondo de su corazón, levantó cuatro dedos para simular una promesa con
ellos - Te haré feliz en cada ocasión que te tenga junto a mí.
Los labios de Lan WangJi se separaron, estaba atónito.
- Tú... dijiste que... no te gustaban...
- Mm - asintió - No me gustan los hombres, solo me gusta Lan Zhan.
Su ceño estaba profundamente ceñido, parecía confundido y miraba a
Wei WuXian como si este fuera una amenaza.
- Wei Ying, no es gracioso.
"Claro
que no me cree, en este tiempo siempre estaba diciéndole estupideces sin
sentido... además me consideraba un desvergonzado y tan solo unos instantes
atrás me había jactado de dejar un recuerdo en la memoria de una mujer bonita.
A pesar de eso, me siento un poco molesto. ¡Le hablé sinceramente! ¿Cómo puede
dudar de esas palabras? Bueno... en estos momentos su cabeza y su corazón
deberían ser un desastre, tal vez solo lo empeoré después de todo. Qué imbécil.
Tomaré distancia."
- Supongo que no me conoces tanto como para saber cuándo hablo en
serio - aunque no lo había querido decir de tal manera, su tono sonó ofendido -
¿Tienes frío? Puedes quedarte con las prendas interiores, yo me quedaré con la
túnica.
Comenzó a desvestirse para darle la túnica interior que tenía que
tenía puesta, luego se colocó la exterior que yacía secándose frente al fuego.
Si bien estaba seca olía un poco mal debido a que el agua del estanque no
estaba precisamente limpia.
"Me
sorprende que Lan Zhan pueda recordar hasta los olores en sus pesadillas."
- Ten - le estiró la túnica interior, pero Lan WangJi no se movió.
No parecía querer aceptarla pero debía serle insoportable llevar las túnicas
ensangrentadas que tenía puestas, por lo que tampoco se rehusó. Finalmente Wei
WuXian se las arrojó sobre la cabeza y se fue a sentar un poco lejos de él- Te
daré espacio, probablemente te moleste tenerme cerca - "En este momento..." pensó -
Realmente pareciera que me odias.
- No te odio - respondió en un tono condescendiente - Solo no te
entiendo. No sé cuándo bromeas, no sé cuándo mientes... - pareció querer decir
algo más pero al mismo tiempo pareció creer haber dicho demasiado.
Wei WuXian suspiró.
- Jamás le he dicho a alguien que no sea a Lan Zhan que me gusta,
realmente jamás he amado a nadie más que a Lan Zhan de esta manera - comenzó a
hablar con rapidez - Jamás deseé a nadie de la manera en que deseo a Lan Zhan,
pero no tienes cómo estar seguro de mis palabras de la misma manera en que yo
tampoco puedo estar seguro de las tuyas, incluso si es una regla de tu secta y
no deberías mentir y todos digan que respetas las reglas con rectitud, si yo
creo en las palabras de Lan Zhan es porque elijo creer en ellas, porque mi
corazón me dice que eres una persona que no bromearía con ciertos temas o que
haría o no haría tal cosa. ¿Tú no sientes que tu corazón dice algo con respecto
a mí? ¿Crees que podría decirte que estoy enamorado de ti como una broma luego
de verte derramar lágrimas? ¿Sabiendo que estas sufriendo crees que podría
jugar de esta manera? ¿Quién me crees? - a medida que hablaba realmente elevó
su tono mostrándose molesto - ¡Aah! Detesto sentirme tan enfadado - refunfuñó -
Yo quería consolarte pero solo lo arruiné. Duérmete, si no descansas no te
recuperarás y ya deben ser cerca de las nueve.
Evitó mirar a Lan WangJi y se acurrucó acostado en su solitario
lugar. Era incómodo pero se sentía ofendido, se le escapó un sollozo. Alarmado
de su reacción tapó su boca para evitar el sonido del siguiente.
Culpó de su sensibilidad al hambre.
"¡Mierda!
Muchas veces me arrepentí por no haber animado a Lan Zhan de alguna manera en
esta ocasión. ¿Cómo puedo ser tan inútil incluso ahora? Si no me calmo, seré yo
quien necesite consuelo... Realmente soy ridículo."
- Wei Ying... - llamó con voz contenida, pero esta vez Wei WuXian no
contestó - Te creo capaz de bromear sobre eso, pero... espero no sea este el
caso porque yo... - bajó la voz cada vez más. El más bajo se reincorporó en un
segundo y fue hasta él casi corriendo, se arrodillo frente a su rostro y lo
miró desde muy cerca, olvidando completamente su estado de ánimo anterior.
- ¿Me quieres? - preguntó mirándolo sin pestañear. Sabía la
respuesta, pero su corazón necesitaba escucharla.
- Te quiero - le susurró con firmeza mirándolo a los ojos aún en
tono bajo, casi un susurro.
- ¡Lan Zhan! - se lanzó sobre su pecho y volvió a abrazarlo - ¡Lan
Zhan, lo siento, me desesperé cuando te vi llorar y no pensé en lo que hacía!
No pude consolarte, lo siento... No debí esperar una confesión en este momento,
soy tan egoísta... te amo, te amo - unas gentiles manos tocaron su espalda con
cierta timidez.
- Entonces es verdad... - susurró incrédulo.
- ¿No me crees? ¿Cómo puedo demostrarle a mi Lan Zhan que mi corazón
lo atesora? - con un puchero lo miró a corta distancia - ¿Y si te beso? Pero
debes saber que en este momento jamás he sido besado. Tú eres el hombre de mi
primer beso, tienes que ser tú.
- Mn - asintió. Wei WuXian rió por su respuesta y rozó su nariz con
la de Lan WangJi un par de veces antes de darle un gentil beso. Si bien su idea
era ser cariñoso con aquellos labios que tanto le gustaban, fue el mismo Lan
WangJi quien tomó su rostro y profundizó en su boca buscando su lengua para
acariciarla con la suya de una forma dulce y persistente. Se abrazaron
firmemente mientras se perdían en la sensación de tenerse mutuamente hasta que
el dolor punzante en el pecho hizo a Wei WuXian dar un salto.
- ¡Aah! Duele, ash... - no podía consolar la quemadura con una
caricia por lo que solo se abanicó con la mano en esa dirección - Lan Zhan, mira,
ahora esta cicatriz simbolizará el día de un primer beso entre nosotros - rió
satisfecho. Lan WangJi soltó airé bruscamente por la nariz, como si quisiera
sonreír pero no lo hizo. Aún así sus ojos se veían alegres - ¿Cómo te sientes?
- le preguntó al momento que sentía la mano del más alto arreglar un mechón de
su cabello para colocarlo detrás de su oreja.
- Egoísta...
- ¿Por? - se asustó.
- No debería ser un momento para sentirme tan... feliz.
"¡Ah!
Quisiera desnudarlo, pero debo pensar en su herida."
- Siempre es un buen momento para sentirse feliz. Además descuida,
porque todo estará bien - tomó la mano de Lan WangJi y se acomodó a su lado,
hombro con hombro - Descansa, tus ojos se ven cansados, apóyate en mí.
Aún con las manos entrelazadas, el más alto obedeció y cerró los
ojos. No habían pasado más que un par de minutos cuando toda la visual se hizo
borrosa y el sueño acabó.
.
.
.
En La Profundidad de las Nubes Wei WuXian se negó a abrir los ojos a
pesar de que se sabía despierto hacía varios segundos, probablemente solo
porque acababa de salir del sueño de su compañero y le tocaba descansar en la
soledad de su subconsciente. Sintió un par de caricias en sus mejillas y un
suave beso en la comisura de sus labios, no pudo responder porque su cuerpo no
despertaba del todo, solo alcanzó al escuchar una frase antes de dormirse.
- Gracias... Wei Ying.